Hormigón y hierro. 10/11/2012
El olor de la montaña se impone sobre el hormigón y el hierro
Cuando llueva.
El revuelo traído por la tempestad da vida a la cárcel.
El peligro primordial la convierte en refugio.
En otros momentos la pena toca arpa con mi pecho
Pincha mis gandulas lacrimógenas.
Los 32 pasos del patio no caben en mi pensamiento.
No cabo en el patio. No cabo en la cárcel.
Un cercado de gente. Cercado de delincuentes desarmados.
Y por otro lado:
El sagrado derecho al trabajo.
Del obrero de construir una cárcel.
Del electricista de poner las sistemas de seguridad.
Del arquitecto de diseñarlo.
Del carcelero.
Que se joda la civilización del Capital.
Hormigón y hierro.
Los presos duros como el hormigón y el hierro.
No como el diamante.
Afortunados.
Afortunados quienes fueron encarcelados. Nadie puede detenerles.
Afortunados quienes casos fueron cerrados. Nadie puede sentenciarles.
x Tasos Theofilou (A grecia)
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